lunes, 7 de abril de 2008

Blanca habla del frenètico ritmo tras el alargue de la teleserie...

Hola, disculpa por no haber contestado antes el teléfono. Estaba metida en un taco, pero, ya, empecemos”, dice Blanca Lewin acelerada y pisando sus propias palabras.
Viene de una semana de trabajo extenuante con las grabaciones del alargue de “Lola”, el reloj se ha convertido en su peor enemigo, pero asegura que pilas aun le quedan.
“Es bien encima todo”, dice aludiendo a las grabaciones, que en que se hacen y se exhiben hay apenas dos días de desfase, y que la tienen interpretando a Lola y Pepa al mismo tiempo.
“Estamos mas o menos con el mismo horario. Normalmente entro a las ocho de la mañana y salgo a las siete. Pero hay días que avanzamos mas rápido”, detalla sobre la teleserie que el pasado miércoles tuvo un peak de 30 puntos.
-Haces dos papeles, como Álvaro Rudolphy en “Amores de mercado”, quien termino estresado a morir, ¿Cómo está Blanca?
- Me tengo que aprender dos veces cada uno. Pero depende como se va dando la historia porque no siempre están los dos personajes juntos.
- El alargue era peligroso, pero los resultados han sido buenos.
-Obviamente estamos súper contentos y la idea es seguir con la teleserie en estas circunstancias (exitosa). Capaz que estemos haciendo “Lola” hasta no sé cuando, jajajà.
-Héctor Noguera y Elvira Cristo dicen que grabarán hasta septiembre. ¿Qué te parece que “Lola” dure un año?
-No había considerado eso…Pero claro, vamos a estar un año con la teleserie al aire. Y, nada, va a ser una cosa inédita para las teleseries chilenas y me parece interesante que ocurra como fenómeno.
-Así como van vamos a terminar conociendo a los nietos de Lalo.
-jajajà. Yo también tenía ese temor de qué iban a hacer ahora. Pero me empecé a dar cuenta que habían un montón de cabos sueltos que se dejaron en el camino y que ahora se están agarrando.
-¿Sientes la presión de no poder enfermarte, de estar siempre disponible?
- Pero angustiarse por eso es un error. Si me quiebro una pata o me resfrío tendremos que todos asumir las consecuencias. Si me angustiara porque, más encima, no me puedo enfermar, solo me enfermaría más.